Boletin no. 1764



El bienparado o pájaro estaca, un habitante distinguido del ZooMAT



• La Reserva El Zapotal, pulmón natural de Tuxtla Gutiérrez, alberga en su interior al Zoológico Regional y es refugio de más de 100 especies de aves

La Reserva El Zapotal, enclavada en la ciudad capital del estado, es una de las áreas naturales más importantes de Chiapas, que alberga en sus 111 hectáreas un gran número de especies visibles al ojo humano, sin embargo, uno de los grupos de aves más extraños y difíciles de observar son los Nyctibidos, conocidos comúnmente en Chiapas como pájaro estaca, miracielo o bienparado.

Estas aves tienen la costumbre de percharse en ramas secas simulando ser parte del tronco. Permanecen posados durante todo el día con la vista fija al cielo, aparentando ser parte de la rama; este extraordinario mimetismo les permite pasar inadvertidos por completo ante posibles depredadores.

Es importante mencionar que en toda América existen siete especies, dos de las cuales habitan en México y Chiapas, que son muy similares y sólo se distinguen por algunos aspectos mínimos de tamaño y coloración.

Sus hábitos son nocturnos, poseen cola y alas largas, boca ancha, pico corto y patas pequeñas. Los ojos durante el día los mantienen cerrados y en la noche lucen grandes pupilas. Se alimentan de insectos, incluyendo escarabajos a los que atrapan al vuelo abriendo su enorme boca, haciendo vuelos cortos de la rama en la que están perchados.

La Reserva El Zapotal ha sido refugio de diversos ejemplares de bienparado. Se puede observarlos ocasionalmente durante el día en alguna rama o tronco seco donde permanecen inadvertidos. Durante varios días ocupan la misma percha y repentinamente cambian de sitio.

A inicio del mes de mayo, a orillas del andador del circuito del recorrido del ZooMAT, se vio un ejemplar de pájaro estaca posando sobre una rama de un chicozapote seco; a diferencia de otras ocasiones, éste se siguió observando diariamente en el mismo sitio durante todo el día.

En los primeros días de junio, a través de una foto se pudo observar que el ejemplar en libertad ya tenía un pequeño polluelo que por instantes se asomaba entre las plumas del vientre del progenitor, el cual seguramente se trata del macho, pues según observaciones previas de la biología reproductiva de esta especie, que realizó don Miguel Álvarez del Toro, el macho es el que incuba y protege a la cría durante el día, mientras que por la noche lo hace la hembra.

En el seguimiento diario que se ha dado a este suceso, raramente perceptible para los visitantes y público en general, estas semanas se ha detectado un crecimiento satisfactorio, por lo que a la fecha ya puede observarse sin necesidad de binoculares al polluelo con un tamaño de la mitad del adulto.

Así como sucede con esta especie, la Reserva El Zapotal, área natural donde se encuentra enclavado el ZooMAT, es también un importante refugio de más de 100 especies de aves que se encuentran en libertad y que en esta temporada están en su etapa reproductiva, por lo que se pueden ver polluelos de chachalacas, ocofaisanes, cojolitas, calandrias, mirlos, charas, tucanes, entre varias más.

“En su próxima visita al zoológico le invitamos a que abra sus sentidos y traiga binoculares para poder disfrutar de la maravilla que la naturaleza ofrece, como son las aves en libertad, que, al detener el paso en los senderos, podrá encontrar con sus pequeñas familias, y si al final de su recorrido se detiene frente al mono saraguato negro, seguramente podrá ver la presencia del pájaro estaca. De no encontrarlo, puede solicitar apoyo de los compañeros de vigilancia que le ayudarán a ubicarlo”, indicó el ZooMAT.

El zoológico se encuentra abierto de martes a domingo de 9:00 am a 4:00 pm. Como recomendación especial se pide al visitante no ingresar plásticos de un solo uso, con el objetivo de cuidar el equilibrio de los ecosistemas que en la reserva existen, portar la hidratación en contenedores reutilizables, ropa cómoda y calzado apto para caminar y disfrutar de los más de 2 kilómetros del sendero que tienen las instalaciones.

 

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