El ZooMAT continúa atendiendo especies decomisadas provenientes del tráfico ilegal

Actualmente cuida a 36 loros que fueron robados de nidos, llegaron deshidratados, desnutridos y estresados; la sobrevivencia de animales en estas condiciones es del 50 por ciento

El Zoológico Regional “Miguel Álvarez del Toro” (ZooMAT) recibió a 36 loros de tres especies distintas procedentes de un decomiso realizado por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), los cuales están siendo atendidos por el equipo médico del ZooMAT, ya que presentan cuadros de desnutrición, deshidratación y estrés debido a las condiciones de su captura y transportación.

Dentro de las especies rescatadas se encuentran 20 cotorras frente naranja, siete loros frente blanca y nueve cotorras gachupinas, que fueron extraídas de sus nidos; algunos de ellos aún no han terminado de emplumar por lo que requieren de un cuidado especial que incluye condiciones de temperatura y humedad específicas. Actualmente se hidratan con jeringas y se les alimenta con papillas, explicó Imelda González López, encargada del Área de Aves del ZooMAT.

Las dos semanas siguientes serán críticas, ya que es común que se presenten bajas por el estado de estrés y trastornos de nutrición a los que fueron expuestos, lo cual los hace susceptibles de fallecer. El promedio de pérdidas en tales condiciones es de alrededor del 50 por ciento, apuntó el coordinador estatal para el mejoramiento del ZooMAT, Joe Miceli Hernández.

El tráfico de aves es un problema real. Estamos en temporada de anidación y el tráfico de estas especies aumenta mucho en esta temporada. Los pericos, cotorros y loros son los que más sufren porque las personas los compran mucho.

La comercialización de los psitácidos está prohibida en el país; es el grupo de animales al que pertenecen: pericos, guacamayas y loros. La recomendación es no adquirir ninguna especie silvestre y denunciar a las autoridades si se tiene conocimiento al respecto.

Cabe destacar que los decomisos son efectuados por la Profepa, instancia que decide quien resguardará y se hará cargo de las especies decomisadas hasta que se le asigna un destino final, esto de acuerdo con la disponibilidad de cada institución.

 

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